Hemos incorporado a la sección de Archivos sonoros del portal SIPCA el trabajo “Recopilación de tradición oral en el Parque Cultural de San Juan de la Peña. Fase 2”, realizado en 2007-2008 por las investigadoras Sandra Araguás y Nereida Torrijos...
Fortificación para la cual se han aprovechado dos gradas naturales en escarpe y concéntricas de arenisca de forma triangular que se erigen sobre otros dos bancales pétreos.La muralla debió de rodear todo el perímetro de la plataforma, aunque los restos conservados abarcan unos 40 metros de lienzo, con una torre, que apenas se aprecia, de planta rectangular y buena sillería. Los sillares son de unos 0,40 por 0,40 m, con restos de un tosco almohadillado, colocados a soga y tizón, aunque hay hiladas en las que se disponen sólo a tizón.En las distintas campañas arqueológicas desarrolladas en este yacimiento se han encontrado algunas estancias excavadas en la roca. En una de ellas, de grandes dimensiones, apareció la planta de una nueva torre. En la mayoría hay series de huecos horadados en la roca para, presumiblemente, sujetar estructuras lígneas. La puerta de entrada era accesible por una larga escalinata excavada en la roca. Tenía arco de medio punto con dovelas bien trabajadas de mediano tamaño. Apoya sobre dos torreones ahora muy arruinados.Al conjunto debe sumarse un aljibe, situado en su parte central, cubierto por una cámara excavada en la roca y varios silos, de sección semiesférica y boca circular o rectangular, con reborde para colocar una tapadera.
En las viviendas populares más antiguas, fechadas entre los siglos XIV y XVII, llama la atención la proliferación de elementos defensivos como las aspilleras, matacanes y, muy especialmente, grandes torreones. En nuestra comunidad autónoma contamos con más de un centenar de casas torreadas, que fueron declaradas BIC por el Gobierno de Aragón, localizadas en las sierras orientales turolenses y en el Pirineo y prepirineo altoaragoneses. Ambos conjuntos presentan grandes diferencias. Recorremos las torres turolenses, construidas en la baja Edad Media para proteger las masías dispersas y atestiguar también la prosperidad de sus propietarios.
Jesús Vázquez ObradorSabiñánigo, Comarca del Alto Gállego, 2002